El nuevo objetivo del bando de Trump para gritar fraude
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Este es el nuevo ángulo de ataque del bando de Trump para denunciar el "robo" de la elección presidencial estadounidense: el software electoral Dominion habría, según él, borrado o reasignado a su rival millones de votos destinados al presidente.
¿Qué es Dominion?
Dominion Voting Systems es una empresa canadiense fundada en 2003 con sede en Estados Unidos en Denver, Colorado. Especializada en tecnología electoral, proporciona a las autoridades locales las máquinas y el software asociado que muchos estadounidenses usan para votar.
Según un estudio de la Wharton School of Business de la Universidad de Pensilvania, su tecnología llegó a más de 71 millones de votantes estadounidenses en 2016, en un total de 1.635 comunidades. Esto lo convierte en el segundo proveedor más grande del país, detrás de la empresa Election Systems & Software.
Donald Trump transmitió en un tweet el jueves, en mayúsculas, información de la conservadora One America News Network (OANN) según la cual el software Dominion había "borrado 2.7 millones de votos de Trump en todo el país", y que cientos de miles de votos destinados a él habían sido reasignados a Joe Biden en estados que usaban tecnología Dominion.
Desde entonces, su escolta se ha basado en esta "información" para dar fe del fraude electoral a gran escala que denuncia sin pruebas concretas que lo respalden.
Comenzando por el abogado personal del presidente, Rudy Giuliani, quien dijo el domingo en otro canal conservador, Fox News, que Dominion era "un negocio de la izquierda radical".
"Una empresa extranjera, que tiene vínculos muy estrechos con Venezuela, y por tanto con China, y utiliza software de una empresa venezolana que se ha utilizado para robar elecciones en otros países", dijo entre otras acusaciones con acento conspirativo.
OANN no publicó en línea su informe sobre Dominion, del que Donald Trump se hizo eco el jueves en Twitter. El gerente del canal dijo en un correo electrónico a CNN que figuraría en una investigación a gran escala programada para transmitirse el 21 y 22 de noviembre, sin especificar en qué pruebas se basaba.
Dominion Voting Systems se defendió en un comunicado de prensa contra cualquier falla de su software. Se refiere a "errores humanos" en el procesamiento de datos de "ciertos condados", incluido Michigan, pero asegura que estos incidentes aislados se resolvieron rápidamente.
Varias autoridades electorales locales y nacionales, incluida la agencia de ciberseguridad y seguridad de la infraestructura (CISA), que depende del Ministerio de Seguridad Interior, también descartaron este jueves la posibilidad de manipular votos en máquinas.
"No hay evidencia de que un sistema electoral haya borrado, perdido o cambiado votos, o que haya sido pirateado de alguna manera", dijeron en un comunicado conjunto. "La elección del 3 de noviembre fue la más segura en la historia de Estados Unidos".
Trump sigue gritando que ganó, pero la esperanza de recuperar Pensilvania se desvanece
En Twitter, el presidente de Estados Unidos continúa martillando, en letras mayúsculas, que ganó las elecciones presidenciales. Sin embargo, es interesante notar que Trump ya no habla en primera persona del plural sino en singular.
Sus posibilidades de recuperar ciertos estados clave a través de la justicia se están reduciendo. Así, la campaña de Trump abandonó parte de sus demandas en Pensilvania. Según el Washington Post, los abogados del bando de Trump han presentado una nueva versión de su acusación, que ya no menciona el hecho de que los funcionarios electorales de la región violaron los derechos de la campaña de Trump al impedir que sus observadores monitorearan el recuento de votos. Trump y su abogado Rudy Giuliani argumentaron que, como resultado, más de 600.000 votos en el estado deberían haberse anulado. Como recordatorio, Joe Biden ganó Pennsylvania con unos 70.000 votos más que su rival republicano.
Los abogados de la campaña de Trump ahora se están enfocando en las acusaciones de que los republicanos estaban en desventaja porque algunas circunscripciones de tendencia demócrata permitieron a los votantes corregir errores en sus boletas. Los distritos, sin embargo, dijeron que solo afectó a una pequeña cantidad de votos.
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