Por qué el arroz se debe comer con moderación
Un nuevo estudio confirma el vínculo entre el consumo de arroz y los riesgos cardiovasculares.
Uno de los cereales más consumidos en el mundo, el arroz es uno de los alimentos básicos que se encuentran en todas las cocinas. Pero esta planta, cuyas raíces crecen en el agua, se une particularmente bien al arsénico en su forma inorgánica. Este semi-metal está abundantemente presente en el agua de los arrozales, especialmente en Bangladesh, y representa un peligro real para nuestra salud ya que promueve el desarrollo de cánceres y enfermedades cardiovasculares. Según investigadores de la Universidad de Manchester y la Universidad de Salford (Reino Unido), la exposición a esta sustancia aumenta el riesgo de muerte.
Mayor riesgo de muerte prematura
En los últimos años, la asociación entre el consumo de arsénico y arroz ha sido objeto de numerosos estudios. El más reciente, publicado en la revista Science of the Total Environment, destaca la correlación entre el consumo de arroz y la mortalidad cardiovascular. El riesgo de muerte prematura es incluso un 6% mayor para los que consumen mucho arroz. Para llegar a tales resultados, los investigadores utilizaron datos sobre alimentos y salud de las autoridades de Inglaterra y Gales. "Entre los consumidores de arroz en Inglaterra y Gales, el 25% que consume más arroz probablemente podría tener un mayor riesgo de mortalidad cardiovascular en comparación con el 25% que consume menos", explica el profesor David. Polya, Universidad de Manchester.
Elija arroz basmati
Para limitar los riesgos, los científicos recomiendan consumir arroz basmati o blanco, que contiene menos arsénico inorgánico. En un informe sobre el arsénico en el arroz publicado en la revista estadounidense Consumer Reports en 2015, los investigadores recomendaron enjuagar el arroz antes de usarlo y cocinarlo en más agua (aproximadamente 6 tazas de agua) para uno de arroz). Este método de cocción reduciría así el contenido de arsénico en un 30%.
También puedes variar los placeres con otros cereales como el trigo, la espelta o incluso la quinoa.